Capítulo 7 – Fructífero Otoño[1]
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“Fuhhh…”
En la sala de mi casa.
Suspiré estando sentado en mi sofá.
La exploración con Harumachi-sensei terminó correctamente.
De hecho, no fue ni muy buena pero tampoco muy mala.
La profesora se cambió de ropa y se fue a su casa.
Se veía bastante feliz cuando se fue…
Recordé la sonrisa de la profesora justo cuando se fue de la casa.
Nuestra combinación ahí dentro fue buena una vez supimos adaptarnos.
Parece ser que ella estaba feliz por eso.
“¿Debería venir mañana?” Ella me preguntó eso con una sonrisa, esperando una respuesta positiva.
Ah, por cierto, cuando terminamos la exploración, secretamente le disparé una flecha con la Ballesta del Amor en la pierna de la profesora.
Resonó el disparo, pero la flecha disparó en el momento en que se hundió a su cuerpo, por lo que ni siquiera lo notó.
Parece ser que el efecto surtió buen efecto, lo pude ver en sus ojos.
Bueno, idearé un plan para mañana.
Mañana es sábado.
Parece ser que la profesora quiere venir desde la mañana, pero tengo otras cosas que hacer aparte de explorar.
Y eso es—
“……”
Saqué mi celular y abrí la aplicación de mensajería.
Entonces abrí la imagen de una de mis compañeras de clases.
Y escribí esto:
[Hay algo de lo que quiero hablar contigo, ¿puedo ir a tu casa mañana?]
Y respondió, sorprendentemente rápido:
[Tengo planes, pero los cancelaré. Estaré esperándote]
[Haha, lo siento..]
Sintiéndome algo extraño, solo respondí con otro mensaje.
[Bueno, nos vemos mañana a las 10am]
Como respondió bastante rápido, parece ser que esperaba hablar conmigo.
¿Tanto quieres conocer mi secreto?
Sí… la persona a la que le envié el mensaje fue a la chica misteriosamente intelectual.
Akitsu Maya.
Al día siguiente, el sábado por la mañana.
Tal y como prometí, estaba frente a la casa de Akitsu-san.
Mirando el reloj, las manecillas apuntaban un poco antes de las 10 en punto.
No quería quedar como un impuntual.
“……”
De paso, miré la casa de Natsuno-san al otro lado.
No parece que vaya a salir nadie por esa puerta. Es algo decepcionante no ver a Natsuno-san.
Es un poco antes de la hora, pero es mejor ir directamente a la casa de Akitsu-san.
Me paré justo frente a la puerta y apreté el timbre.
Resonó un sonido electrónico.
Y antes de que terminara el sonido del timbre, la puerta se abrió—
“Bienvenido… te estaba esperando, Sain-kun.”
“A-Ah…”
Akitsu-san abrió la puerta y me saludó.
Sentí un extraño sudor recorrer mi frente.
No solo porque la puerta se abrió inmediatamente.
Sino porque los ojos de Akitsu-san brillaban como los de un león frente a su presa.
Aparentemente, Akitsu-san tiene altas expectativas de esta visita.
No era una atmósfera normal.
“Entra pronto, no quiero que te vea Hiyori.”
Akitsu-san me jaló del brazo y me hizo entrar a la casa.
Tiene bastante fuerza.
Sin embargo, no tengo intención de retroceder.
Así que entré a su casa.
“Hablemos en mi cuarto. Ah, no te preocupes, no están mis padres.”
“… está bien.”
Me tranquiliza que no estén sus padres.
Quiero decir, en un mundo perfecto podría…
Aunque tenía sentimientos encontrados, dejé que me siguiera jalando del brazo y subimos las escaleras.
Parece que su cuarto está en el segundo piso.
Por cierto… se ve bastante atractiva.
Al ver a Akitsu-san delante de mí subiendo las escaleras, pensé en eso.
Llevaba una blusa de manga larga tejida de color café, y en la parte inferior, una mini falda negra con medias negras.
Parece que su atuendo es el típico que te encuentras en las boutiques del centro de Tokyo.
Pero… las curvas de su cuerpo son exageradas, es extremadamente erótica.
Sus pechos se ven impresionantes, y aunque la esté viendo desde atrás, puedo sentir cómo rebotan sus nalgas con cada paso que da.
Tal vez… decidió ponerse esta ropa pensando que aumentaría su sex appeal…
Si ese es el caso, no pretendo rechazar ninguna invitación suya.
Tal vez, haya una pequeña posibilidad…
Bueno, por ahora…
Lentamente estiré mi brazo libre hacia ella.
Abrí mi palma y la coloqué en su cadera.
Ohhh, con que así se siente el cuerpo de Akitsu-san… ¡Es bastante suave…!
Bajé mi mano y comencé a acariciar sus nalgas con mi mano derecha.
Sin embargo, ella ni siquiera se dio cuenta. Solo siguió llevándome al segundo piso y pasamos por el pasillo.
Continué acariciando sus nalgas tanto como quise mientras caminábamos.
Ahhh, se siente muy bien.
Nunca pensé que tocar el cuerpo de una mujer sería tan sencillo.
Bueno, la verdad es porque tengo puesta la Pulsera de la suerte.
Sí… esa pulsera de color rosa estaba en mi mano derecha.
Y su efecto me permite acosar sexualmente a quien quiera sin que lo note.
No importa cuán extremo sea el contacto, Akitsu-san jamás se dará cuenta.
“Esta es mi habitación. No tienes por qué estar nervioso…”
Avanzando por el pasillo, Akitsu se detuvo y me miró.
Respondí con calma y procedí a tocar sus voluminosos pechos.
Uhmmm, son grandes.
Son mucho más grandes que los de Harumachi-sensei.
“Nhh…”
Akitsu-san, quien no podía detectar nada, dejó salir una suave respiración.
Pero, gracias al efecto de la Pulsera de la Suerte, no puede darse cuenta de nada.
Con naturalidad, me llevó a su cuarto.
Haah… esta es la habitación de Akitsu-san… es la habitación de una chica normal.
Cuando entré a su cuarto, me sorprendí de que fuera tan normal.
El interior era limpio y brillante.
Las paredes eran blancas y las sábanas eran de un color rosa palo.
En el suelo una alfombra de color blanco y al centro, una pequeña mesa.
Alrededor, estaban dispuestas dos almohadillas.
Olía a la habitación de una chica—huele bastante rico.
“Sentémonos si quieres…”
“Sí.”
Akitsu-san apuntó a las almohadillas en el suelo, y sin vacilar, apreté sus pechos y asentí para sentarme.
El cuerpo de Akitsu-san es muy erótico.
Quiero tocarla tanto como pueda.
Pero sería raro no actuar con naturalidad, así que me senté tal y como me dijo.
Akitsu-san se sentó en la almohadilla al lado contrario.
Entonces, aclaró su garganta con un ‘kohon’.
“Bien… Saino-kun, ¿de qué querías hablar? ¿O te pusiste nervioso al entrar a mi habitación?”
Akitsu-san puso una mirada bastante perspicaz.
Oh, qué miedo.
Cuando Akitsu-san, quien siempre se la pasa sonriendo, pone una mirada así de seria, se siente bastante poderosa la tensión.
De pronto, tragué saliva.
Pero, me preparé para esto, así que no tengo miedo.
Levanté mi mano derecha, y para aliviar mi tensión, acaricié sus pechos mientras respondía.
“Eso es… bueno, aquella vez de la sombrilla. Creo que estabas bastante interesada en saberlo, Akitsu-san.”
“¡…! Fufufuh… finalmente.”
Akitsu-san puso una sonrisa placentera.
Su sonrisa era inteligente y fría.
Akitsu-san, no tienes ni la menor idea de que estoy tocándote los pechos.
“Nhh, bueno, ahhnn, si vas a hablar, nhhh—hablemos…”
“Sí. Será un poco largo. Así que te pido paciencia.”
“Fufu, nhaaa, no tienes idea—hnnnnn—de cuánto quería saberlo, ahnnnnn. Así que está bien, escucharé toda la historia—nhhh.”
Akitsu-san no comprendía mis intenciones ocultas.
Tal vez, lo mejor sea prologar la plática lo más que pueda.
Bueno, mientras, seguiré tocando su cuerpo.
Así que mientras manoseaba sus pechos, abrí la boca.
“Akitsu-san, parece que te diste cuenta de lo que sucedió cuando usamos la sombrilla.”
“Nhhh, mhhh, más o menos. Hiyori parece que no lo notó, pero, nhhhh—eso fue algo extraño, hmmm.”
“… así que planeo decírtelo. Pero, Akitsu-san, antes que nada, debo comenzar a hablar de hace aproximadamente 100,000 años, en la Era Paleolítica.”
“Nhhh, ¿Era Paleolítica…?”
Las palabras de Akitsu-san sonaron como si se hubiese caído de la sorpresa.
Es natural.
Yo estaría igual si repentinamente escuchara la palabra “paleolítica”.
Parece que me fui demasiado atrás en la historia.
Bueno, en cierto modo quiero alargar esta conversación tanto como pueda.
Bueno, seguiré hablando.
Ah, pero no le diré la verdad.
Solo pretendo hablar por mucho y tocar su cuerpo.
El propósito de mi visita es solo este.
Por supuesto, es probable que sepa que le estoy mintiendo.
Pero hay algo de verdad en mi mentira.
Soy un aventurero.
Tengo conocimientos sobre arqueología ya que toda mi vida ha sido entorno a esto.
Así que, estoy bastante familiarizado con estos temas.
Mis padres tienen miles de libros sobre estas cosas, y en general nuestras únicas pláticas son sobre ello, así que toda mi vida he discutido con expertos en la materia.
Con ese conocimiento, haré verdad mis mentiras.
Mezclaré 99% verdad y 1% mentira
Así que pensé claramente la mentira perfecta.
“La sociedad como tal ha existido en todas las regiones del mundo.”
“Nhhh… nfuuuuu…”
Akitsu-san escuchaba mi explicación con suspiros ocasionales.
No parece sospechar nada.
Tal vez le interesa mi plática sobre civilizaciones antiguas.
Akitsu-san, quien tiene una enorme curiosidad, es propensa a esto.
Pero como narrador, no soy muy bueno que digamos.
Ahhh. Los pechos de Akitsu-san se sienten muy bien…
Continuando con mi explicación, disfruté de los pechos de Akitsu-san de diversas maneras.
Ya me lo había imaginado, pero tocarlos, es maravilloso.
Si los levanto desde abajo puedo sentir su peso.
La suavidad y la elasticidad se mezclan entre sí, haciendo que me den ganas de tocarlos por siempre.
De tamaño son… como dos melones, más o menos.
No sabría decir con exactitud qué copa es, no tengo mucho conocimiento sobre tallas de bra.
“Nhhhh… ¿y… nhh?”
“Ah—sí, esto se relaciona con el descubrimiento de un fósil en una cueva en Canada, hace 27 años—”
Estaba tan absorto en sus pechos que olvidé hablar.
Es buen disfrutarlo con mi mano, pero también tengo que mover mi lengua y hablar.
Recuperé la compostura y continué explicando.
Con eso en mente, comencé a pensar en el siguiente paso.
¡Ya va siendo hora de tocarte por debajo de la ropa…! ¡O jugar un poco con tu entrepierna…!
Solo puedo tocar el cuerpo de Akitsu-san.
Ahh… me estoy cansando de mi mano, ¡tengo que acercarme más…!
Han pasado 10 minutos desde que comencé a explicar mi mentira.
Descansé un poco mi mano que casi se sentía entumecida.
En esta posición era algo cansado manosearle los pechos.
Ya disfruté mucho de sus pechos, así que debería cambiar de lugar.
Suspiré con algo de cansancio.
“Fuuuh… lo siento, Akitsu-san. Me siento un poco cansado. ¿Podríamos ponernos en una posición más cómoda?”
“¿…? Mientras sigas hablando...”
Akitsu-san asintió a mis palabras, aunque se veía un poco sospechosa.
Le agradecí a Akitsu-san… pero ella no se movió.
Es difícil tocarla porque estamos un poco lejos.
De preferencia me gustaría acercarme más a ella.
“Es por eso que tengo una petición…”
“¿Una petición…?”
“Sí, es algo pequeño.”
Akitsu-san inclinó su cuello y sonrió.
Y—
“Akitsu-san, ¿puedo usar tus piernas como almohada?”
“……”
Akitsu-san se quedó en silencio ante mi petición.
Es una reacción natural.
Si un hombre que no es tu novio te pide eso, lógicamente te quedarás sorprendida.
Incluso para mí, fue difícil pedírselo.
Pero estoy lleno de confianza.
Esto es necesario.
Si se siente incómoda o algo, simplemente dejaré de hablar.
Akitsu-san luce bastante débil en este momento.
Además, usé la Sombrilla que Siente al Destino en ella por 10 minutos.
Considerando los leves sentimientos de amor que tiene hacia mí, debería de oponer menos resistencia a mis peticiones.
“Bien… está bien.”
Akitsu-san respondió suavemente, y asintió con su cabeza.
Se puso de pie y se sentó en la cama.
Aparentemente no estaremos en el suelo.
Me acerqué a la cama junto a Akitsu-san.
Y lentamente, puse mi cabeza en los muslos de Akitsu-san.
Pero—
¿¡Woo…!?
Pude sentir la increíble carne de sus piernas a través de su mini falda.
Esto es completamente distinto a una almohada.
Quiero decir, la elasticidad y suavidad es increíble…
Akitsu-san parece tener la temperatura corporal elevada.
“Sigamos hablando.”
“Nh… sí.”
Las palabras de Akitsu-san me trajeron de nuevo a la realidad.
Así no puedo ver su rostro.
La razón es simple.
Hay dos pares de objetos que me impiden la visibilidad.
“Bueno, uhn… al principio, las razas lucharon entre sí para sobrevivir…”
Aunque estaba abrumado por la vista de los objetos frente a mí, me las arreglé para seguir explicando.
Sé cuán grandes son porque los estuve tocando, pero verlos de cerca da una impresión completamente distinta.
¿Tendrán el tamaño de mi cabeza?
Bueno, seguiré manoseándola…
Recuperando mi espíritu, comencé a tocar esos enormes pechos que casi tocaban la punta de mi nariz.
Era mucho más fácil de esta forma que en la mesa.
Ver esas dos esferas de carne cambiar de forma justo frente a mí, es deleitante.
“Nhhh… fuhhh…”
La respiración de Akitsu-san se agitaba cada que tocaba sus pechos.
Parece ser que no es consciente de que está haciendo estos ruidos debido a la Pulsera de la Suerte.
Si le doy más placer, seré capaz de escuchar unos gemidos más fuertes y placenteros.
Muy bien, entonces…
Dejé de tocar sus enormes pechos con mi mano.
Y gracias a esta posición, puedo meter mi cabeza entre sus piernas para separarlas.
Es una posición complicada para tocarla, pero deberá funcionar.
Así que metí mi mano entre los muslos de Akitsu-san.
Qué increíble presión…
Son extremadamente carnosos sus muslos.
La presión y elasticidad es muy fuerte, mi mano queda atrapada entre ellos.
Sin embargo, puse fuerza para separar sus piernas.
¡Muy bien…!
Después de batallar un poco, por fin creé un pequeño espacio para moverme libremente.
No había resistencia.
Tal vez ni siquiera notó que abrí sus piernas.
Es un objeto bastante útil.
Parece ser que ni siquiera notó que había abierto las piernas.
Así que seguí mi camino.
Y finalmente—
“¡Nhhhh…!”
Su cuerpo se estremeció en cuanto mis dedos tocaron esa parte suave.
Parece ser que toqué un punto débil.
“Nhhh, ¡anhhh…!”
La dulce voz salía de la boca de Akitsu-san.
Su voz era mucho más fuerte.
¿Este sitio es tan sensible?
Toqué la carne de ese lugar con mis dedos, de arriba abajo.
Imaginando dónde estaba mi dedo por encima de su ropa.
Lo pasé por sus labios hasta llegar al clítoris.
“Me cansé de hablar, descansaré un poco.”
“Nhhh, anhhh… sí… Uhmmm, entiendo… ¡anh!”
Es una lástima tener que seguir hablando y no disfrutar de esto.
Pero ella no se quejó, solo aceptó mientras gemía.
Tal vez su cabeza está perdiendo la facultad de pensar correctamente debido al placer.
No sabe que está siendo manoseada por mí.
Bien… ¡en ese caso…!
Intenta contenerte.
Haré que gimas fuertemente.
Y de ser posible, haré que te vengas.
De hecho, es triste que yo no pueda venirme.
Pero, como hombre, también tengo el deseo de hacer feliz y satisfacer completamente a una mujer.
Además, no es nada difícil si esa mujer es la erótica Akitsu-san.
Podré disfrutar de hacerla llegar al orgasmo.
Comencé a tocar su clítoris, el cual era peculiarmente sensible.
“¡Ahhhh…!”
El cuerpo de Akitsu-san se sacudió.
Su dulce voz era casi hipnótica.
“Nhhh… ahnnnn, ¡mhhhh! ¡Saino-kun…!”
“¿Qué sucede, Akitsu-san?”
“Nhhhh… ahhhh, nada, ¡no es nada…!”
Akitsu-san sacudió su cabeza inmediatamente.
Tal vez, su boca se movió por sí sola.
Pero, es probable que haya dicho mi nombre debido a la calentura de su cuerpo.
Sin embargo, aún no he terminado.
Seguiré acariciando su lugar más privado.
Parece que está a punto de llegar al orgasmo, sus gemidos lo denotan.
La Pulsera de la Suerte tiene la habilidad de ‘no ser visto mientras tocas’, pero tal vez tenga otra particularidad como ‘evitar que la otra persona note el placer’.
“¡Uhnnnnn…! Nhhh, ¡anhhhh! ¡Ahhhhnn!”
Akitsu-san elevó el tono de su voz en ese instante.
Sentí humedad en la punta de mis dedos, aún a través de sus bragas y medias. Parece que sus fluidos vaginales se derramaron.
Su parte más íntima estaba completamente empapada.
“¡Nhhhhaaa…!”
Cuando sacudí mis dedos en círculos, el cuerpo de Akitsu-san se estremeció.
Sus pechos rebotaron frente a mí.
Y continué moviendo mis dedos, apretando su clítoris.
En ese momento—
“¡Nhhhhhhaaaaaaa…aaaahn!”
“¡Uh…!”
Akitsu-san se agarró la cabeza y su cuerpo entero tembló con fuerza.
Se inclinó hacia el frente y sus pechos quedaron presionándose contra mi cara, haciendo que respirar fuese un poco difícil.
Sin embargo, parece que a Akitsu-san no le importó eso, ella siguió estremeciendo su cuerpo.
Podía escuchar su respiración agitada.
Sí… finalmente… ¡finalmente hice que Akitsu-san se viniera!
Una misteriosa sensación de éxito llenó mi cabeza.
Fui capaz de darle un orgasmo a Akitsu-san.
Además, ni cuenta se dio.
Abrazando esa felicidad, traté de escapar de la presión que ejercían los pechos de Akitsu-san y me puse de pie.
“Bueno, hay varios antecedentes históricos, pero, en resumidas cuentas, tengo una peculiar constitución que me hace liberar una especie de feromonas extrañas.”
Le di una explicación directa para terminar con esta larga historia.
Cumplí mi objetivo. No necesito hablar más.
Es una manera terrible de terminar esto, pero con esto bastará.
Akitsu-san no protestó, solo asintió con su respiración agitada.
“Nhhh… ahhh… eso es, cierto… mientras estabas acostado en mis piernas, me sentí un poco extraña… ¡nhhhh…!”
“¿En serio? Ah, lo siento, no puedo controlarlo. Bueno, espero que te haya quedado claro lo que te expliqué.”
Le respondí con total naturalidad a Akitsu-san.
Esto es lo que estaba buscando.
Si no se daba cuenta de que la estaba tocando, llegaría al orgasmo misteriosamente.
La única forma de hacer coincidir esto con lo de las feromonas, era que no se diera cuenta de nada.
Así que, por eso mismo preparé esta mentira.
Y con esto, quedaría también aclarado lo de la sombrilla.
Los objetos de aquella y esta ocasión, son completamente diferentes.
Pero la excusa de las feromonas, es aplicable para ambas.
Así que es una mentira bastante conveniente.
“Ah… siento haberte pedido que me recostaras en tus piernas.”
Con esto, puedo zafarme.
Fue divertido hacer esto con Akitsu-san, pero mi pene no se siente tan aliviado.
Quiero ir a casa a liberar todos mis deseos, recordando lo que acaba de suceder.
Estoy seguro de que saldrá una enorme cantidad de semen.
Lo espero con ansias.
Sin embargo, cuando traté de dejar la habitación—
“¡Espera… espera…!”
Akitsu-san me llamó en voz alta.
Me di la vuelta, de cierto modo me molestó ese tono de voz.
“¿Qué?”
Entonces se puso de pie con sus piernas temblando y caminó hacia el closet de la habitación.
“¿…?”
Akitsu-san separó la ropa dispuesta en el closet.
Como si quisiera encontrar algo en el fondo.
Solo me quedé mirando, y tragué saliva…
Lo que estaba en las manos de Akitsu-san era—
¿¡U-Una cámara…!? ¿¡Tenías una cámara escondida…!?
Claramente lo que tiene en sus manos es una cámara.
Y el botón rojo está encendido, así que está grabando.
Aparentemente, la historia entera que le acabo de contar, la grabó…
Pensé que había sido cauteloso… pero era de esperarse, Akitsu-san es mucho más cautelosa que yo.
No, ¡estoy impresionado…! ¿¡Entonces ahora qué haré…!?
Traté de maquinar una idea en mi cabeza a toda velocidad.
La Pulsera de la Suerte tiene la habilidad de que la persona a la que tocas no puede verte.
Sin embargo, eso es algo bastante ambiguo.
Otras personas pueden verte, así que es probable que la cámara también pueda detectar el movimiento de mi mano.
Si de pura casualidad, la cámara captó mis movimientos… estoy jodido.
La explicación mediocre de las “feromonas” se irá a la mierda.
Pero… esto es algo que no pude anticipar.
No importa qué tanto piense. Es inútil.
Solo puedo rendirme ante las garras del destino.
“……”
Akitsu comenzó a moverle a la cámara.
¿Debería robarle la cámara?
No, si hago eso… me veré bastante sospechoso.
¡Esto no tiene sentido…!
Akitsu-san comenzó a reproducir el video.
Estaba adelantándolo para ver todo en el menor tiempo posible.
Después de un minuto, su expresión—
“Ah… ¡esto es increíble, Saino-kun! ¡Realmente solo te recostaste en mis piernas!”
“¿Eh?”
Escuché una alegre y estúpida voz.
Akitsu-san, por alguna razón… tenía una sonrisa.
¿Qué es lo que te pone feliz?
A juzgar por sus palabras, está feliz de que no haya hecho nada más que recostarme.
Akitsu-san me mostró la pantalla de la cámara.
“¡Mira—mira! ¡Increíble!”
“A-Ah…”
Claramente en ese video… mi mano está tocando la entrepierna de Akitsu-san.
Tal vez ella no puede verlo por el efecto de la Pulsera de la Suerte.
No sé qué responder, solo asentí.
Pero ella, está sonriendo.
“¡No me lo puedo creer…! ¡Las feromonas de Saino-kun son realmente poderosas!”
“U-Un poco…”
Akitsu-san se levantó la falda, dejando su entrepierna visible.
Pude ver sus bragas y la parte superior de sus medias.
Parece que ni siquiera le incomoda esto.
“¡Saino-kun, eres muy interesante! ¡Déjame investigar esa extraña constitución tuya!”
“Uh……”
Akitsu-san me propuso eso con demasiada alegría.
Ni siquiera sé que responderle.
Pero, tras esta situación, finalmente pude comprender qué clase de chica es Akitsu-san.
Esta chica, tiene una increíble hambre de conocimiento.
Sé que me encontraría con algo inesperado, pero esto, está fuera de lo que me imaginé.
Creí que solo aceptaría mi ‘verdad’ sin más, pero, sus ojos brillaban con intensidad.
Su hambre de curiosidad y conocimiento, era visible.
Nunca supe cuál de sus dos caras era la real, ahora mismo sé, que ambas caras son reales.
Bueno…
Akitsu-san estaba increíblemente feliz.
Mientras la veía, solo pude pensar en que esta situación, se ha vuelto más complicada de lo que creí.
“¡Vamos—vamos! ¡Déjame investigarte!”
“Bueno…”
Akitsu-san me agarró con fuerza de los hombros.
No sé qué responder mientras ella sacude mi cuerpo.
Ahora que sé cómo es ella, sé que no perderá interés en mí tan fácilmente.
Para Akitsu-san, quien siempre busca lo desconocido, creo que esto es inevitable.
Ahhh… y ahora qué hago…
Puse a trabajar mi mente.
Posiblemente Akitsu-san de prioridad a examinar mi cuerpo.
Así que, en cierto modo, esta puede ser una buena oportunidad.
Sin embargo—
¿Será tan fácil…?
Imaginé lo que sucedería si tuviéramos sexo.
Tal vez me propondría algo como ‘déjame investigarte y a cambio te dejaré hacérmelo’.
De cierto modo, no tengo intención de negarme a esa oferta.
Pero siento que en algún punto de esto, habrá problemas.
Definitivamente aceptaría esa oferta… el cuerpo erótico de Akitsu-san debe sentirse muy bien.
Su cuerpo es demasiado sexual.
Quiero balancear mis caderas detrás de esas nalgas tan grandes.
También quiero masajear sus pechos desnudos y clavar mi trozo de carne en su entrepierna.
No hay mejor cuerpo que el de ella para dejarme llevar por la lujuria.
“¿Aceptarías bajo algunas condiciones…?”
Akitsu-san me susurró al oído.
Parece ser que se dio cuenta de que estaba viendo su cuerpo.
¿Cómo diablos puedo responder a esto?
¿Cuál será la mejor respuesta que asegure un buen futuro?
Lo que debo proteger, es la existencia del laberinto para poder seguir encontrando objetos eróticos.
Uhnn… cierto, no tengo por qué preocuparme del laberinto…
Una idea vino a mi cabeza.
Akitsu-san sería la clase de mujer que diría ‘¡vamos a explorar juntos!’.
Incluso, es posible que pueda darme más rienda suelta a actos sexuales que cualquiera de las otras chicas.
La posibilidad me abruma.
Pero…
Decidí hacerle una pregunta antes de.
“Akitsu-san… que tal si esa condición significa traicionar a Natsuno-san, ¿igualmente lo harías?”
“¿Qué…?”
Ante mis palabras, Akitsu-san se detuvo un momento.
Sus ojos se abrieron por completo.
Después de todo, ¿Natsuno-san es especial para Akitsu-san?
“¿Traicionar a mi mejor amiga…? Ciertamente, parece que a Hiyori le gustas, Saino-kun. Pero, eso es por las feromonas, ¿verdad?”
Diciendo eso, Akitsu-san me miró fijamente.
Parece estar dispuesta a sacrificar todo para satisfacer su curiosidad, y la relación con su mejor amiga no es una excepción.
Está bien, esto lo confirma…
Puedo dar rienda suelta con ella.
Siempre y cuando la excusa sea, ‘no puedo controlar las feromonas por mí mismo’.
Sin embargo, si revelo la existencia del laberinto, no podré poner mis manos en Natsuno-san.
Y eso será—porque Akitsu-san hará lo posible para interferir.
“Ah, estoy bromeando. Lo siento.”
“……”
Me disculpé, pero ella me siguió mirando.
Pero, de pronto, Akitsu-san suspiró y gritó.
“¡No bromees…! ¿Me dejarás ver? ¿Por favor?”
Su voz se escuchaba medio cansada.
Si me niego, ella seguirá insistiendo.
Pero, si le digo la verdad, mis posibilidades con Natsuno-san se verán limitadas.
Entonces, lo mejor sería ir formando una buena relación con Akitsu-san.
“Está bien… puedes checarme, no tengo ninguna condición visible en especial. Pero si lo deseas, está bien.”
“Gracias…”
Ante mis palabras, Akitsu-san puso una mirada compleja.
Sin embargo, sé que está feliz de poder estudiar lo desconocido.
¿Qué es lo que tanto te aburre de tu vida diaria?
“Por el momento, me iré a casa. Tengo planes para la tarde.”
“Ya veo… ¿cuándo podemos vernos?”
“Uhmm… no lo sé. Pero yo te aviso cuando sea conveniente.”
“Está bien, nos vemos.”
La despedida fue corta, y parece que Akitsu-san aceptó.
Como tengo planes de ir al laberinto esta tarde con Harumachi-sensei, debo irme a casa.
Además, quiero darme una buena masturbación en honor a Akitsu-san.
Ah, por cierto, eso de ‘yo te aviso cuando sea conveniente’, en realidad es un ‘yo te aviso cuando quiera tocar tu cuerpo’.
Si extraño tu cuerpo erótico, te mandaré un mensaje.
De seguro me dirá de inmediato que sí.
Akitsu-san me guio hasta la entrada de su casa.
Me puse los zapatos.
“Estaré esperándote…”
“Sí, lamento molestarte.”
Con ese pequeño intercambio de palabras, abrí la puerta.
Sentí la brisa fresca.
La habitación de Akitsu-san tiene un aroma dulce, así que mi nariz se acostumbró. Por lo que sentí el aroma del exterior demasiado fresco.
Es la primera vez que me siento así.
Bueno, es la primera vez, desde la primaria, que entro a la habitación de una chica.
Cerré la puerta.
Y estiré mi pie para dar un paso.
Por ahora, vamos a casa.
Pero en ese momento, mis oídos resonaron…
“¡Uuhaaaaaah…! ¡Uhhhh…!”
Un dulce si ahogado sonido.
¿Es alguien… gimiendo?
Por la intensidad del sonido, deduzco que es una mujer.
Me preocupé, así que detuve mis pasos.
¿De dónde viene el sonido?
¿Detrás?
No, a un lado—
Ahh, ya veo…
Comprendí la naturaleza de ese sonido.
Los gemidos misteriosos provenían de la casa del lado de la de Akitsu-san.
Es decir… la casa de Natsuno-san.
“¡Uhmmmm…! ¡Nhhhaaaa…!”
“Hey—hey, qué haces, Natsuno-san.”
Me reí un poco.
Hablando de, ayer hice algunas cosas pervertidas con ella usando la Campana de la Súcubo.
Vi su bra de Misha-chan y sus pechos.
Además, le enseñé mi pene.
Natsuno-san, anoche debió haber soñado en todo eso.
Qué interesante reacción tuviste.
Por cierto… ¿tiene abierta la ventana? ¿O por qué se escucha tan fuerte?
De seguro dentro de la casa se oye mucho más intenso.
Me pregunto qué pensará su familia al respecto.
Si Akitsu-san la escucha tal vez vaya a verla.
Pero tengo que regresar.
Siento dejarte así, pero tengo una misión que cumplir.
Si no vuelvo pronto, Harumachi-sensei llegará primero que yo.
“¡Ahhhhhh…!”
Incluso afuera de su casa podía escucharlos.
Los ignoré y me dirigí a mi casa rápidamente.
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