EPÍLOGO

Traducción Jap-Esp: Trihexa

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Tras terminar con Riziel, Rakshal y las demás seguían luchando contra el ejército de demonios afuera.

De inmediato salí de la fortaleza con Riziel y ella les ordenó un alto al fuego, haciendo que la batalla terminara.

Rakshal y las chicas estaban casi intactas. De hecho, todas subieron de nivel al final de esta batalla.

El ejército demoniaco tuvo a varios heridos debido a mi violencia, pero ninguno de gravedad o que no pudiera ser tratado. Parece ser que no quedarían rencores.

Tras el recuento de daños, volamos a la capital del reino para informar lo sucedido.

Al regresar al castillo, decidí hablar con Gasper.

Cuando terminé mi informe, Gasper me miró fijamente.

“Ya veo, Vain-dono. Muchas gracias. De hecho sin ti nada de esto habría sido posible…”

“No agradezcas tanto.”

Me reí para aligerar el ambiente.

“Ahora eres nuevamente el Rey, no te inclines ante un simple viajero.”

“Pero, Vain-dono… lo hiciste tan fácil. Nos has devuelto la paz. Como tu amigo, me gustaría agradecerte.”

“Si ese es el caso… lo aceptaré. De nada.”

Espontáneamente, yo dije esas palabras.

Parece que comienzo a creer que tener amigos no es tan mala idea.

“Por cierto, Vain-dono. ¿Vas a cruzar el mar para ir al continente del oeste?”

Me quedé sin aliento ante la pregunta de Gasper.

Al devolver la piedra, la fortaleza marítima recuperó su poder y ahora podía atravesar el mar sin problemas.

Mi objetivo actual es conocer tantos lugares como pueda.

“Es una pena… realmente hay muchos lugares más en el Reino de Northmore por conocer aparte de la capital. Realmente me hubiera gustado darte un paseo, Vain-dono.”

“Tampoco es que me despida para siempre. Volveré en algún momento.”

“Si es así, asegúrate de darte la vuelta por el castillo. Mi hija y yo te daremos la bienvenida a ti y a tus compañeras.”

“Ah. Shinhwa estará complacida de volver a ver a Rakshal—”

Cuando dije esas palabras, se ahogaron ante la presencia de un ruido metálico proveniente del corredor del castillo.

… abrí la puerta mientras tenía un mal presentimiento.

“Fufufuf… o-otra vez solo estiraste tu brazo, Rakshal…”

Como era de esperarse, en el corredor, vi la escena de Shinhwa, cuya armadura había sido destruida mientras que Rakshal sostenía una de sus espadas dobles.

Tal vez, volvió a burlarse de Rakshal como de costumbre.

“Si no dejas ese mal hábito tuyo, algún día morirás, Shinhwa.”

 

“Hahahahaha… qué puedo decir de mi hija.”

Gasper se encogió de hombros y suspiró.

Al terminar mi informe, viajamos de nuevo a la fortaleza marítima.

El ejército de la Reina Demonio, tenía múltiples usuarios de magia de recuperación, así que todos los que resultaron heridos en la batalla, ya estaban recuperados cuando nosotros regresamos.

Parece que las palabras de Riziel llegaron a todos los demonios, ya que no hubo hostilidad por parte de ellos.

Pudimos movernos libremente una vez le devolví la piedra mágica que era la unidad de poder de la fortaleza.

Parece ser que la fortaleza es una herramienta mágica, y la piedra mágica le suministra el poder para lograr moverse.

Riziel me dio un tour encantada por toda la fortaleza.

“Esa luz de allá… ¿qué es?”

Pero, todo lo que Riziel hizo fue mostrarme.

“Esa luz proviene del poder mágico que es absorbido de la propia piedra por la herramienta mágica, Rosa.”

“La piedra mágica inyecta su poder en la herramienta, Risa.”

Las hermanas súcubo eran quienes daban las explicaciones.

Las súcubos a menudo se asocian a seres sexuales, pero en realidad pertenecen a un grupo de alto rango entre los demonios.

“Ara, el tipo humano nos está viendo, Rosa.”

“Es un mero demonio que no tiene suficiente con solo Riziel-sama, Risa.”

“… chicas, dejen ese mal hábito de solo estar hablando entre ustedes.”

Si no fuera por eso, serían unas buenas guías.

 

Tras ver el departamento de energía, salí porque quería respirar algo de viento fresco.

Ya era casi de noche, estaba oscureciendo.

La fortaleza marítima está rompiendo las olas, navegando hacia el continente del oeste.

Según la explicación de las súcubos, llegaríamos en diez días.

“¡Ahh! ¡Hey, Vain-kun…!”

De pronto, escuché una voz que me llamaba desde arriba. Era una voz ya bastante familiar, así que volteé.

“¿Tamara? Eh… Kia también.”

Kia descendió llevando a Tamara frente a ella, abrazándola.

“Tama-chan quería que le diera un paseo por el aire.”

“Ahahaha… lo único que puedo hacer con mi capa es planear…”

“Bueno está bien. Por el atardecer es más fácil andar volando.”

“Sí… se siente bastante bien volar…”

A diferencia de las alas de Kia, quien pude volar ignorando las leyes de la gravedad, la capa de Tamara básicamente es una tela que puede cambiar de propiedades físicas.

… supongo que Kia también está feliz de volar junto con Tamara.

“Pero, es extraño viniendo de ti.”

“Uhm… supongo que es algo de nostalgia. Una chica como ella, me recuerda a las lindas estudiantes que tenía.”

Ya veo, por eso se ha encariñado bastante.

Volteé hacia Kia para saber qué pensaba.

“¿…? ¿Qué pasa Vain? ¿Quieres aparearte?”

“Hey, ¿acaso crees que cuando veo a una mujer solo quiero aparearme?”

“¿Me equivoco?”

“Claramente te equivocas.”

Naturalmente tengo un gran deseo sexual, pero no siempre pienso en ello. Claro.

Entonces, Kia abrazó a Tamara.

“Pero, Vain. Ya lo hiciste también con Zels-sama, pero no con Tama-chan. Creo que es importante que te aparees con ella. Qué malo eres al dejarla al último.”

“¿¡Espera!?”

Tamara soltó una voz avergonzada ante la audaz propuesta de Kia.

“Tamara… ¿realmente piensas eso…?”

“¡N-No! Tama-chan en la tarde me dijo que le contara qué se siente aparearse. ¡Fue una plática de chicas, no pienses nada malo!”

“No, no pienso nada malo. De hecho, me intriga por qué estaban hablando de eso. Cuéntame a detalle.”

“¡No!”

 A veces no entiendo el corazón de las mujeres.

Mientras hablábamos, escuché los pasos de dos personas acercarse.

“Hola, Vain-sama. ¿Cómo estás?”

“Ustedes, siempre son muy ruidosas…”

Eran Rakshal y Zels.

Rakshal estaba tan animada como de costumbre, pero Zels se frotaba los ojos.

“Solo estamos platicando. Hey Zels, ¿ya estabas dormida?”

“Ufufu. Ha pasado un tiempo desde que Zels-sama durmió sobre mis piernas. La cara de Zels-sama dormida es bastante linda.”

“¡C-Cállate Rakshal…!”

Rakshal lo dijo con una sonrisa y Zels solo se sonrojó.

“Dormiste en sus piernas…”

Creo que por fin se están llevando otra vez bien.

Ahora tampoco tengo que ocultar mi relación con Rakshal, así que todo se arregló.

Mientras me sentía satisfecho, Zels me miró.

“¡No dejaré que duermas en las piernas de Rakshal! ¡Esta vez defenderé mi lugar!”

“¿Zels-sama? Pero yo pertenezco enteramente a Vain-sama…”

“¡No! ¡Siempre lo complaces! ¡No dejaré que Vain te monopolice!”

Rakshal solo levantó las cejas, pero de pronto pareció ocurrírsele una buena idea.

“Entonces, ahora que los dos ya se llevan bien, ¿qué tal si lo hacen ambos? ¿Qué opinas, Zels-sama, Vain-sama?”

Rakshal se arrodilló y palmeó sus piernas, Zels inmediatamente se agachó y se acostó sobre ellas.

“Zels-sama, deja un espacio. ¿Quieres venir también, Vain-sama?”

“Me niego. Por qué debería hacerle un espacio si este es mi lugar.”

Con una expresión de desdén, a regañadientes Zels hizo espacio en las piernas de Rakshal.

Puse mi cabeza en ese espacio…pero no era muy estable poner dos cabezas en las piernas de Rakshal.

“Mantente quita, Rakshal.”

“Sí… ¿no será así porque solo te estás moviendo, Zels-sama?”

“¿¡Qué!? ¡Por qué Vain tiene que ponerse aquí también…!”

Ante sus palabras, me giré y abracé a Zels.

“¡Hyah…!”

Zels sacudió su cuerpo… pero, presionó sus pechos contra mi cuerpo.

“Sí… así no nos moveremos…”

Zels puso sus orejas en mi pecho con una sonrisa gentil.

Me pregunto si estará escuchando los latidos de mi corazón…

Mientras pensaba eso, sentí que me veían desde arriba.

“Eso es injusto… Rakshal-chan, Zels-chan, ¡yo también quiero…!”

“Yo también quiero. ¡Quiero que estemos todos juntos!”

Tamara y Kia se pusieron encima de mí y de Zels.

Sus pechos suaves se presionaron contra mi cintura y mis piernas, podía sentir el peso de ambas.

Rakshal sonrió y dijo con una voz forzada.

“Ahhh… mis piernas se están adormeciendo… no creo poder soportar a todos. Ah ya sé, ¿por qué no dormimos juntos todos hoy?”

Fue una idea bastante impactante por parte de Rakshal, de hecho me sorprendí.

Incluso Zels y Tamara, ellas se sonrojaron.

Kia solo estaba inexpresiva, pero sus ojos brillaban de algún modo.

“Con una cama grande debería estar bien, sino, podríamos juntar unas tres camas.”

“Rakshal-sama, estoy de acuerdo. Quiero que durmamos juntos.”

Cuando Kia habló, las demás no pudieron quedarse calladas.

“¡Fuhn…! Está bien por mí si la comparto con Rakshal. Pero si realmente quieren todas, supongo que no puedo evitarlo.”

“Y-Yo también quiero que durmamos juntos. No significa que sea algo impuro… bueno, después de todo puedo intervenir si algo extraño sucede. Soy una maestra…”

… ninguna de ellas es realmente honesta.

Eso es lo que pienso, pero en el fondo, todas son bastante lindas.

Mientras pensaba eso, escuché unos suaves pasos acercándose.

“¿Oh? Parece que se están divirtiendo… ¡Riz también quiere estar con ustedes…!”

Riziel saltó y al caer, debido a que estábamos en una posición antinatural, a excepción de Rakshal que estaba de rodillas, perdimos el equilibrio y perdimos.

Yo solo me carcajeé al ver cómo terminó esta situación.

Más de la mitad del sol ya se ponía en el horizonte, señalando el final de este día.

Los próximos diez días serán de viaje, en busca de aventuras en un nuevo continente—comenzando desde hoy. Estos serán días llenos de nuevos encuentros y descubrimientos.

Al escuchar el enojo de Zels regañando a Riziel, las demás chicas también comenzaron a parlotear hasta que el sol se puso por completo.

 

FIN.